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HABLAN LAS PIEDRAS – PARTE I

En el pasado tenían por costumbre a la hora de construir una casa datar el año de construcción de la misma, dejándolo reflejado en las piedras de la fachada, pero también había otro tipo de inscripciones de diversa índole. Todas ellas pasan desapercibidas en muchos casos, pero siguen perteneciendo al patrimonio silenciado del pueblo, que algunos pocos lo consideramos como nuestro. Esta peculiar epigrafía tallada en las piedras del caserío se ha clasificado en cinco tipos.

  • 1º- Los blasones eclesiásticos (publicado en la web Historia- efemérides en mayo 2021).
  • 2º- Las que tienen un mensaje escrito.
  • 3º- Las que tienen únicamente la inscripción del año y algunas de ellas, además, con símbolos protectores.
  • 4º- Las que tienen escudos de apellidos.
  • 5ª- Las que tienen otros motivos o signos diferentes.

PARTE I · Los blasones eclesiásticos (explicado en Historia efemérides en Mayo 2021)

Como norma general el blasón eclesiástico tiene forma ovalada que denota el orden sacro, aunque también puede utilizar los conocidos como español y francés, el circular o adoptar indistintamente las formas de cabeza de buey, vaca y cabeza de caballo. Se colocaban tallados en piedra en las casas parroquiales habitadas por clérigos. En la actualizad en Olmillos se conservan seis casas con blasones o escudos eclesiásticos, aunque hubo dos casas más que fueron derribadas por peligro de ruina. Es probable que estas casas de clérigos también tendrían blasón eclesiástico, desconociéndose datos de los mismos al desaparecer las viviendas.

Según narran testimonios de nuestros mayores, hubo una etapa en la que oficiaban en la iglesia a la vez varios *párrocos, incluso formaban a los jóvenes de la comarca, adoctrinándolos en la fe cristiana para iniciación al sacerdocio en un particular retiro, cuyo topónimo aún en día se conserva “el prado de los estudiantes” (que se encontraba en paraje en dirección Perex).

*párrocos solo había uno, los demás eran curas beneficiados, habiendo incluso quien no era presbítero, sino tan solo diácono. Por eso se los denomina en la documentación racioneros de ración entera, medio racioneros y porcioneros, que quiere decir que, si uno ganaba 2000 reales, otros la mitad y los últimos unacuarta parte o porción.

Calle Real 33 – La piedra del dintel de la puerta con inscripción epigráfica escrita en latín.